Ventajas de hacerse OMV a través de un OMV Enabler

Cómo hacerse OMV
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En el negocio de las telecomunicaciones, para algunos operadores llega un momento en el que se plantean si deberían convertirse en OMV y las ventajas que obtendrían de ello. Una opción que también podría aplicarse a proyectos que se inician desde cero y que directamente se plantean la fórmula del OMV Prestador de Servicios, con el que pueden ofrecer soluciones de telefonía móvil utilizando la infraestructura de red de otro operador. Pero, ¿cómo puede abordar este proceso? Para ello necesitará de un OMV Enabler. ¿Qué hace esta figura? ¿Qué beneficios aporta convertirse en OMV? En este artículo de Aire Networks queremos despejar todas las dudas.

 

Qué es un OMV y tipos

Desde que en el año 2006 se liberó el sector de las telecomunicaciones en España, se ha permitido la existencia de lo que comúnmente se conoce como OMV, cuyas siglas significan Operador Móvil Virtual. Se trata de operadores que no tienen infraestructura propia de red, por lo que necesitan colaborar con los operadores que la tienen, los llamados Operadores Móviles de Red.

 

Hay dos tipos de OMV: completos y prestadores de servicio, que suponen modelos de negocio diferentes. En el primer caso, disponen de sus propios elementos de red troncal, SIM, código de operador y recursos de numeración. Gracias a ello, las llamadas pueden empezar y/o terminar en su propia red. En cambio, los OMV prestadores de servicio no cuentan con numeración propia y en comparación con los primeros, tienen una menor infraestructura; tampoco tienen SIM propia ni código de operador. Opcionalmente, pueden tener sistemas de facturación y atención al cliente, dependiendo de su OMR.

 

La figura del OMV Enabler

Los Mobile Enabler, como Aire Networks, realizan un trabajo de intermediación entre el OMV y el OMR, poniendo a disposición de los primeros servicios de operación, facturación e integración, entre otros, de forma que puedan acortar su salida al mercado y reducir la inversión necesaria para ello.

 

De esta manera, a través de un contrato mayorista proporcionado por el OMV Enabler, el nuevo OMV se convierte en un operador de pleno derecho para ofrecer el servicio de telefonía móvil cara a la CNMC, AOPM y queda integrado en Nodo Central con su propio código de operador móvil.

 

Pero, ¿por qué ser un OMV?

Como en cualquier otro escenario de negocio el objetivo debe quedar claro antes de nada y para ello, la reflexión previa debe determinar si dar el paso de ser comercializador a convertirte en OMV cumple la lógica y evolución de qué quiero ser, dónde quiero estar y lo más importante, cómo quiero hacerlo.

 

Ventajas de convertirse en OMV

  1. Ser soberano en las decisiones de negocio

Al ser OMV se tiene la libertad de diseñar sus propios paquetes de servicios, precios y estrategias de marketing, como producto, precio, distribución y comunicación. Esto les permite adaptarse más fácilmente a las necesidades y preferencias de sus clientes, así como diferenciarse de la competencia con una óptima especialización y segmentación de clientes.

 

  1. El usuario final pasa a ser legalmente del OMV

Desde nuestra experiencia con los operadores, una de las ventajas que más interesan es que el usuario final pase a ser legalmente del futuro OMV ya que, desde un punto de vista más financiero, la compañía que es el prestador directo del servicio, eleva su valor al tener “en propiedad” los clientes finales.

 

  1. Ampliar la cartera de clientes

Por otro lado, convertirse en OMV te facilita ampliar la cartera de clientes ofreciendo una gama más amplia de soluciones de telecomunicaciones y tecnológicas, ya que la especialización y centralización de todo ello posiciona al OMV como proveedor único cara al usuario con desarrollos a medida y capas de valor diferenciadores.

 

  1. Diseñar la arquitectura comercial de la fuerza de venta

En cuanto a la política de distribución y canales de comercialización, el OMV puede diseñar la arquitectura comercial de su fuerza de venta ya que la prestación del servicio de telefonía móvil la realiza directamente el OMV, asumiendo y decidiendo la operatividad comercial.

 

El proyecto OMV

Convertirse en OMV con Aire Networks permite a un comercializador móvil operar sin la necesidad de construir o mantener una infraestructura o núcleo de red con todo lo que ello conlleva como son equipos especializados, desarrollos de alto alcance e inversiones económicas elevadas en equipamiento y otros recursos.

 

 

Por otro lado, y a considerar como el punto más importante, es la puesta en producción sin que el usuario se vea afectado en el proceso de lanzamiento, por lo que desde Aire Networks trabajamos dentro de un entorno estable, controlado y seguro, poniendo en valor nuestra experiencia como OMV Full Enabler en el que ya aparaguamos varios OMVs.

A destacar que todo esto es posible gracias a una óptima planificación, eficiencia en los procesos, desarrollos in house y sobre todo contar con los mejores profesionales y equipo técnico. Por ello podemos asegurar que el time to market se reduce a 3 meses ajustando significativamente los costes de proyecto, producción, lanzamiento y permite que el OMV-PS  comience a ofrecer servicios de telecomunicaciones más rápidamente.

 

¿Cuáles son los requisitos para hacerse OMV?

Hoy en día para ser un OMV es necesario iniciar un proceso administrativo para que a todos los efectos se esté habilitado como prestador de servicio de telefonía móvil. Para poder conseguir este objetivo es necesario realizar las tramitaciones necesarias para obtener:

  • Licencia de OMV con la CNMC
  • Código de operador para gestionar las portabilidades (AOPM y NC)
  • Pool de numeración móvil
  • Pool de tarjetas e IMSIs (10.000 MSINSD)
  • NRN subasignado del OMV Full Enabler Aire Networks

 

Desde Aire Networks contamos con nuestro propio departamento Jurídico y de Tramitación especializado para que el futuro OMV pueda contratar el asesoramiento, tramitación y entregables administrativos, de manera que el proceso es más eficiente para alcanzar la puesta en producción, tanto desde un punto de vista administrativo, operativo e integración de servicio.

 

El plazo estimado para gestionar estos trámites es de 3 meses, tiempo en el que de forma paralela y en el transcurso de las gestiones administrativas, los equipos técnicos van trabajando para presentar en sociedad al nuevo OMV. Si quieres más información, no dudes en contactar con nuestro equipo especializado.

 

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